Equipo central: Caldera con quemador de Fuel Oil
Los quemadores son dispositivos que se utilizan para producir la combustión en calderas apropiadas para ello.
Se tienen quemadores de gas natural o GLP, de gas oil y de fuel oil. En el caso del fuel oil, al tratarse de un combustible pesado, la instalación de abastecimiento del quemador es más compleja que con los demás combustibles.
Al tratarse de un combustible pesado, en algunas ocasiones, se lo debe calentar para ser bombeado, y además, al ser “sucio”, se debe realizar un mantenimiento exhaustivo al quemador y a la caldera. El rendimiento puede bajar considerablemente si no se lo realiza.
En general, son quemadores con gran capacidad. Se recomienda para nuevas construcciones, con un gran metraje, con un buen espacio para ubicar la caldera y el depósito de combustible.
Ventajas
- Permite acceder a uno de los costos más bajos de energía de calefacción.
- Excelente confort térmico, tanto con losa radiante como con radiadores.
Desventajas
- Además del espacio ocupado por la caldera se necesita un lugar a utilizar como depósito de combustible, con su peligro asociado. El combustible debe ser abastecido periódicamente.
- Es el combustible más sucio y el que presenta mayor dificultad de manejo. Esto hace que sean los equipos con mayor costo de mantenimiento.
- Deben contar con un adecuado sistema de seguridad.
- Se producen humos contaminantes y con mayores olores que con las calderas a gas.
- Se tiene una inversión inicial elevada debido al costo del equipo y a la instalación.
Costo
El precio de los quemadores depende de su capacidad. En general los quemadores de fuel oil están pensados para grandes aplicaciones (edificios). Un quemador de 230kW de potencia nominal cuesta unos $112.000.
Estos precios no incluyen la instalación ni el resto del sistema (ya sea de radiadores o losa radiante por cañería).