Pantalla
Las pantallas son calefactores individuales donde se realiza la combustión de gas licuado de petróleo (GLP) o gas natural en un quemador y un panel se encarga de irradiar el calor.
Es así que el calor se transfiere mediante la radiación a través de una malla infrarroja instalada sobre una placa de cerámica que optimiza la irradiación.
Estos dispositivos toman oxígeno del ambiente y los gases de combustión también quedan en el ambiente. Si bien los nuevos modelos presentan sistemas de seguridad donde cortan el suministro de gas ante la ausencia de llama o frente a altas concentraciones de CO2 en el ambiente, en el mercado se tienen equipos sin estos dispositivos. Esto hace que se deba ventilar el ambiente de forma periódica.
De acuerdo a la capacidad del equipo pueden calefaccionar ambientes de distintos tamaños, aunque, en general hasta ambientes de unos 15m2.
Ventajas
- Una vez encendidos el sistema se alimenta automáticamente. Mantenimiento sencillo.
- La inversión inicial es muy inferior al caso de sistemas centralizados de calefacción a gas.
- Son dispositivos pequeños. En el caso de utilizar GLP (con garrafas de 3kg), pueden transportarse fácilmente.
Desventajas
- En el caso de gas natural, se debe de contar con el servicio en la vivienda.
- Presentan un panel infrarrojo a la vista que puede ser peligroso para los habitantes del hogar.
- Consumen oxígeno del ambiente a calefaccionar, esto hace que no puedan ser instalados en baños ni en dormitorios. Se debe realizar una ventilación adecuada de la vivienda.
- No producen un gran confort térmico ya que generan un calor localizado. Requieren un tiempo relativamente largo para calefaccionar ambientes grandes.
- Presentan un rendimiento sensiblemente inferior que los calefactores a gas.
Costo
El precio de las pantallas de 1.700W de potencia nominal ronda entre los $500 y $900 dependiendo si tiene válvula de seguridad o no.